Tecnova trabaja en la puesta en marcha de un protocolo de autocompostaje de residuos agrícolas

El crecimiento de la población y la necesidad mundial de alimentos han potenciado durante las últimas décadas el aumento de superficie de cultivo a la producción intensiva de hortalizas. Este sistema productivo lleva asociado el uso excesivo de insumos agrícolas (agua, fertilizantes minerales de síntesis y productos fitosanitarios) y una producción elevada de residuos (orgánicos e inorgánicos), ocasionando graves problemas medioambientales y una falta de seguridad alimentaria.

En el proyecto se trabajará con tres metodologías que facilitarán el avance y la confianza de los agricultores hacia nuevos productos y técnicas que solucionen sus problemáticas diarias desde una perspectiva sostenible. La metodología desarrollada permite establecer un protocolo de autocompostaje a partir de residuos vegetales agrícolas aditivados con biochar.

Este proceso será de gran valor para su aplicación en sistemas de gestión de residuos vegetales y su valorización como enmiendas orgánicas y nutricionales en suelos de cultivo. Así, cumple con cuatro objetivos ambientales como:

  • El aumento del uso de las microrrizas y de compost fomentará la reducción progresiva y paulatina del empleo de productos fertilizantes y fitosanitarios químicos de síntesis.
  • Fomentará la instauración de prácticas agrícolas respetuosas con el medioambiente y con la sociedad, evitando afectar negativamente a la flora y fauna de las zonas agrícolas y reduciendo los riegos laborales.
  • El uso y optimización de los recursos vegetales procedentes de la agricultura a través de procesos de autocompostaje.
  • Minimizará el colapso de suelos agrícolas provocado por la agricultura intensiva, favoreciendo el desarrollo de la microflora del suelo.